HISTORIA

La ciudad de Cajamarca posee un patrimonio cultural, arquitectónico y documental valioso, dentro de este valor urbanístico, se encuentran las viejas casonas de la época colonial, cuyos inmensos balcones, se extendían y daban frente a las calles principales. Una de estas casonas fue la casa de propiedad de la familia Puga, que luego pasó a ser propiedad del Club Social Cajamarca; en su época fue una hermosa casa de dos plantas, cuya construcción, según se dice, data de mediados del siglo XIX.

Era impresionante aquella pileta ubicada en el centro del patio amplio, alrededor del cual se encontraban las habitaciones, que presentaban un enchapado completo con madera de nogal a más de un metro de altura y todos los pisos entablados .

Cuando se decide adquirir esta propiedad como local institucional del club, ésta se encontraba desgastada por el paso del tiempo y solo quedaban vestigios de lo que alguna vez fuera una imponente casona colonial.

En el año 1972 es Don Rafael Puga Estrada, descendiente de la familia Puga, que en aquel entonces era diputado electo por Cajamarca, el que hizo el traspaso de Ia casona a nombre del Club Social Cajamarca, por el precio pactado de 42 mil soles de oro. Siendo presidente del Club el Sr. Napoleón Gálvez Arbulú, convocó a Ios asociados para Iograr un aporte suf1ciente que permitiera el arreglo de la casa a fin de poder ser utilizada. Según consta en Ios respectivos recibos y en las actas, cada asociado tenía que dar la suma de 500 soles de oro, con lo que se hizo el arreglo total de los ambientes. Sin embargo, y a pesar de Ios esfuerzos de los miembros por mantener el Club, el segundo piso ya no estaba en condiciones de ser utilizado.

Hoy en día y gracias al esfuerzo conjunto de todos los miembros aún se mantiene la estructura original de casona, con algunas refacciones en sus espacios para brindar mayor comodidad a nuestra estadía en el club.